Turmalina negra: Esta piedra es muy conocida por sus propiedades de protección y limpieza energética. Se cree que la turmalina negra actúa como un escudo contra energías negativas, absorbéndolas y transformándolas en energía positiva. Es ideal para crear un ambiente seguro, protegiendo tanto al individuo como los espacios de influencias indeseadas. Además, se dice que ayuda a liberar tensiones y estrés, promoviendo el equilibrio emocional y proporcionando una sensación de estabilidad y seguridad. Es una piedra excelente para quienes buscan protección psíquica o energética.

Pirita: La pirita es conocida como la "piedra del dinero" o "piedra de la abundancia" debido a su capacidad para atraer prosperidad y energía positiva. Su energía vibrante se asocia con la creatividad, la acción y la motivación. Se cree que la pirita estimula la mente, ayuda a superar bloqueos mentales y mejora la toma de decisiones. También se dice que tiene un fuerte poder de protección, especialmente en relación con la energía física y material, creando un escudo contra energías negativas y promoviendo el bienestar general.